Normativas RAEE 2025 para desguaces de vehículos

La creciente presencia de sistemas electrónicos en los vehículos ha llevado a un refuerzo de las normativas RAEE (Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos), que en 2025 afectan de forma directa a la actividad de los desguaces. Los coches modernos incorporan cada vez más centralitas, sensores, pantallas y sistemas de asistencia que deben tratarse como residuos electrónicos al final de su vida útil.

La normativa RAEE obliga a los desguaces a identificar, separar y gestionar correctamente estos componentes, evitando que se mezclen con otros residuos o se eliminen de forma inadecuada. Estos elementos deben entregarse a gestores especializados, que se encargan de su tratamiento y reciclaje conforme a los estándares establecidos.

En 2025, el control sobre estos procesos se intensifica, exigiendo mayor trazabilidad y documentación. Los desguaces deben registrar qué componentes electrónicos se retiran, en qué cantidad y a qué gestor autorizado se entregan. Este seguimiento busca reducir el impacto ambiental de materiales contaminantes y fomentar la recuperación de metales y componentes reutilizables.

La normativa RAEE también influye en la venta de recambios electrónicos usados. Las piezas que se comercializan deben haber sido correctamente descontaminadas y verificadas, garantizando que no suponen un riesgo para el usuario ni para el medio ambiente.

Para los desguaces, el cumplimiento de estas normativas implica inversión en formación, procesos y colaboración con gestores especializados. Para la sociedad, supone un avance hacia una gestión más responsable de los residuos tecnológicos asociados al automóvil.