Cambios en normativas ITV para vehículos híbridos
Los vehículos híbridos representan una proporción creciente del parque automovilístico español, lo que ha obligado a actualizar los protocolos de inspección técnica para adaptarlos a sus particularidades tecnológicas. Los talleres deben conocer estos cambios para preparar adecuadamente los vehículos de sus clientes.
La medición de emisiones en híbridos presenta especificidades importantes. Durante la inspección, el motor de combustión debe encontrarse en funcionamiento para poder analizar los gases de escape. Esto requiere que el vehículo llegue a la ITV con suficiente carga en la batería para evitar que el sistema fuerce el arranque del motor térmico, pero también que el inspector pueda activar este motor cuando sea necesario.
Los sistemas de alta tensión reciben atención especial. Los inspectores verifican el correcto aislamiento de los cables naranjas que identifican los circuitos de alto voltaje, comprueban que no existan daños visibles en conectores y revisan que las etiquetas de advertencia permanezcan legibles. Cualquier deficiencia en estos elementos puede suponer un rechazo de la inspección.
El sistema de frenado regenerativo, presente en todos los híbridos, debe funcionar correctamente. La inspección incluye pruebas en banco de frenos que verifican tanto el frenado convencional como la respuesta del sistema cuando actúa la regeneración. Los talleres deben asegurar que ambos sistemas operan de forma coordinada.
La documentación del vehículo también ha evolucionado. Los híbridos enchufables requieren que la ficha técnica refleje correctamente su condición, incluyendo la autonomía eléctrica homologada. Discrepancias entre la documentación y las características reales del vehículo generan problemas durante la inspección.
Las estaciones ITV han incorporado equipamiento específico para híbridos, incluyendo sistemas de diagnóstico capaces de comunicarse con las centralitas de gestión de baterías y verificar que no existen códigos de error almacenados que comprometan la seguridad.
Los talleres que preparan vehículos para ITV deben actualizar sus conocimientos sobre estos requisitos específicos. Ofrecer un servicio de pre-ITV para híbridos que verifique todos estos puntos representa una oportunidad comercial y un valor añadido para clientes que desconocen las particularidades de sus vehículos.